miércoles, 9 de junio de 2010

ORIZURU CON EL JOVEN ARTE ACTUAL

Puede que para algunos pase desapercibida esa puerta azul de la calle San Gregorio. Para mí tiene un magnetismo especial. Despierta mi curiosidad sobre qué nueva sensibilidad artística se esconderá tras ella hoy. Esa sensación siempre diferente al percibir por primera vez la obra de un artista nuevo. Sorpresa, afinidad, comparación, desagrado, recuerdos… toda una serie de respuestas que suscitan las muestras en Orizuru, donde se respira la frescura de un arte actual, que no pesa por sus años sino por el trabajo de los artistas jóvenes que lo están construyendo.

Gracias a Keiko Hoshino, el alma de Orizuru, disfrutamos desde el pasado otoño de un nuevo concepto de galería de arte, un lugar cálido y acogedor en el cual poder pasear la mirada y activar nuestra sensibilidad. Se trata de un bajo restaurado en pleno casco viejo de Pamplona, rodeado de actividad diurna y nocturna, de bares, pequeñas tiendas y bullicio continuo. Un entorno pintoresco desde el que no sólo se proyectan muestras a nivel local. La directora de la galería ha organizado proyectos expositivos a nivel internacional. Un ejemplo es la muestra itinerante de artistas españoles, entre ellos los navarros Daniel Pérez Flamarique y Txon Pomés, para las ciudades de Tokio, Kyoto y el Museo de Arte de Hiroshima. Y también el proyecto expositivo de artistas navarros en Yamaguchi, coincidiendo con el 30 aniversario del hermanamiento entre Pamplona y la ciudad nipona.

El afán de Keiko Hoshino por dar a conocer nuevos nombres y talentos queda patente en todos sus proyectos, y constituye un ejemplo de valentía y compromiso respecto a la producción y el desarrollo del arte actual. Pocas son las entidades que apuestan por el arte aun desconocido, pero son éstas las que permiten crear nuevos imaginarios y abrir nuevos debates entorno al arte, la estética, las tendencias y el mercado, funciones que por naturaleza corresponden a la exhibición del arte objetual. Keiko ha sabido proyectar este aspecto, desde su particular visión de artista plástica, mediante las exposiciones y además desde la didáctica, puesto que ejerce de profesora de arte en diferentes localidades navarras y en su mismo estudio dentro de Orizuru.

En una de las últimas muestras hemos podido disfrutar de varias etapas de su propia obra gráfica y pictórica. Sobre la mesa del saloncito, algunos grabados apilados, en el mostrador unas acuarelas puestas en fila y algunas esculturillas acompañaban dos libros de jóvenes poetas. Ocupando las paredes, cuadros de diversos formatos y momentos de su carrera. Un ambiente sencillamente mágico en el que la delicadeza de los trazos se extiende por todas sus obras. Estaremos muy atentos a cada paso que dé. El próximo, una exposición del pintor Jaume Martorell, “Pincelada de Mallorca” del 11 de Junio al 15 de Julio en Orizuru. 

 09/06/10
Sofía Albero

jueves, 25 de febrero de 2010

LOS ENCUENTROS DEL 72, DE MADRID A PAMPLONA

Ya sabemos que fueron más de 350 artistas los que acudieron a la cita, que fue la mayor puesta en escena del arte experimental vanguardista en el ámbito nacional e internacional, que creó una gran controversia incluso entre los propios artistas invitados y que se considera un acontecimiento memorable fruto del afán por transmitir una nueva libertad creativa. Todos estos aspectos han aparecido maravillosamente ilustrados en la recientemente finalizada exposición sobre los Encuentros de Pamplona del 72 en el Museo Reina Sofía, comisariada por José Díaz Cuyás.

Al inicio, dos salas nos mostraban la trayectoria profesional de los artífices de este acontecimiento, tanto de los mecenas, el Grupo Huarte, como de los organizadores, el grupo ALEA. A continuación, incluyendo documentación, obra original y prensa de la época, se ha hecho una reconstrucción cronológicamente ordenada que, a pesar de ser bastante completa, no puede más que traernos una ligera brisa de aquel vendaval artístico que aireó Pamplona durante una semana. En el catálogo de la exposición se matiza el interés por mostrar tanto los eventos programados como los sucesos que se fueron produciendo al margen y acompañaron a las acciones artísticas. Más de la mitad de este libro funciona como un cuaderno de bitácora que intenta cuadricular todo aquello, que muchas veces se superponía en el tiempo y el espacio, valiéndose del certero transcurrir de los días.






(Vistas de las cúpulas neumáticas en Pamplona, 1972. fotografía de la exposición "Encuentros de Pamplona 1972: Fin de fiesta del arte experimental" Museo Reina Sofía, Madrid)

Pero lo que no sabemos, es por qué hasta este momento nadie había reparado en este acontecimiento sin igual, ni por qué la mayoría de la gente que no tuvo la oportunidad de vivir aquello (bien porque era demasiado pequeño, bien porque todavía no había nacido) ignora completamente que la ciudad donde vive acogió una iniciativa de estas características hace casi cuarenta años. Puede que, sin contar la gente que lo ha estudiado en la facultad, las personas que participaron y las que pasaban por allí, los pamplonicas y afincados a la ciudad estén pisando diariamente el más importante estrato cultural del país sin tener la más remota idea.

Y sabiendo que un acontecimiento así no ha trascendido como debiera dentro del panorama del Arte Contemporáneo en Pamplona, se nos plantea la duda de cómo dar relevancia a la creación artística actual y como conectar la estética que hoy proponen los artistas con el público navarro. Está claro que para comenzar hay que acabar con este letargo que sufrimos y una manera de hacerlo puede ser refrescándonos la memoria y mostrando a todos que por la estafeta no solo han pasado encierros multitudinarios, sino que también han resonado voces proclamando una nueva manera de ver el mundo y el arte.

Esta exposición podrá hacernos reflexionar muy mucho sobre lo poco que sabemos de nuestro patrimonio artístico contemporáneo, y despertar nuestra curiosidad por el arte y la cultura poniendo en funcionamiento de nuevo el engranaje creativo de la ciudad. Del 25 de marzo al 13 de junio de este mismo año podremos disfrutar en Pamplona de todo este trabajo de investigación que se ha realizado desde el Museo Reina Sofía.
25/02/10
Sofía Albero

jueves, 18 de febrero de 2010

LUCHA MATERIA PRIMA PINTURA




Lucha materia prima pintura’ (2009), 200x200cm. Técnica mixta.
Iker Serrano Robles




Inauguramos este espacio de crítica de arte hablando de las obras ganadoras del certamen “Pamplona Jóvenes Artistas 2009”, que se exponen, junto a los demás seleccionados por el jurado del concurso, en la el pabellón de Mixtos de la ciudadela hasta finales de este mes. La obra de la que hablaremos en esta ocasión es la que quedó en segundo lugar en dicho certamen, un cuadro del pintor Iker Serrano.  

Hay dos líneas principales a de argumentación a la hora de evaluar una pieza de arte,  la primera línea es la técnica, la forma en la que esa obra se manifiesta, y la segunda es el concepto, el contenido de lo que está diciendo la obra. De la buena realización de ambos aspectos y la forma en que ambos se relacionan entre sí dependerá la calidad de la obra que estemos evaluando. En este caso ambos aspectos funcionan, tienen calidad y se complementan. 

En lo referido a la técnica podemos afirmar que es una técnica buena, de la observación del cuadro se desprende que el pintor domina la técnica que está usando, que además es una técnica compleja, y sabe someterla para que se doblegue ante los intereses plásticos y compositivos de la obra. La elección por parte de Iker Serrano de la representación figurativa le permite ofrecernos una composición de espacios bien estructurados en los que desarrollar la narración que esta obra nos presenta.  En un entorno en que además se está dando un retorno de lo figurativo en el campo de la pintura  este cuadro y esta técnica encuentran un sitio, una justificación por contexto.

En cuanto al contenido hay varias cosas que destacar. Es de agradecer encontrarse con una obra que diga “algo”, que de alguna manera sea la manifestación plástica de una idea, de un concepto. Esta pintura nos habla del mundo del arte y del artista. El cuadro nos muestra a dos pintores preparados para el combate por el éxito artístico. Ambos armados de sus herramientas de trabajo, pero además acorazados con guantes y casco, esas corazas externas al propio arte pero que al artista le sirven para protegerse y diferenciarse dentro del mundo artístico (rojos contra azules no es otra cosa que una metáfora de la historia de las diferencias: abstractos contra figurativos, paisajes contra bodegones, antiguos contra modernos, etc…). El artista en su trabajo está en constante lucha, lucha contra sí mismo, y contra otros artistas, y esa lucha siempre es en solitario. Otra de las metáforas del mundo del arte la encontramos en la ausencia de espectadores al combate. Parece que el arte es una labor esencialmente exhibicionista, mediante la cual el autor se expone al público, constante tribunal que ha de juzgar su vida y obra. Sin embargo esa exhibición solo se da una vez la obra está acabada, en la lucha diaria del pintor contra sí mismo, contra su obra, contra otros pintores o contra la misma historia del arte  el pintor está solo combatiendo en mitad de un desierto. En vano girará la cabeza buscando entre las gradas al público que le anime a seguir encajando los golpes y aguantando. 

Sin ninguna duda es un acierto que esta obra haya sido premiada en el certamen. 


Iker Andrés

miércoles, 17 de febrero de 2010

PRESENTACION

Conscientes de la carencia que existe en nuestra comunidad en lo referente a crítica de arte presentamos "ART-NAV", un blog dedicado al análisis crítico del arte contemporaneo que puede verse en nuestro entorno, con la esperanza de que tanto artistas como espectadores tengan un lugar de referencia sobre el estado del arte en Navarra.